Mis ojos extrañados,
cerrando o abriendo los parpados
el paisaje es el mismo,
todo negro, todo oscuro,
ni un débil resplandor,
ni un suave rayo de luz…
Apreté mis parpados con fuerza,
solo esta sensación hizo la diferencia…
Llevé mis manos a mi rostro,
el suave calor de mi respiración,
el tacto, la caricia solitaria
me daban señales de que aún estaba vivo.
Inconscientemente mi mente busco en el ayer
sensaciones similares, momentos parecidos,
y me vi ahí, lo recuerdo,
era el fin de un año tormentoso, difícil.
Yo acababa de recibir el pan de vida,
y estaba hincado dando gracias,
buscando como siempre respuestas o directrices,
hasta que solo quedé en silencio interno,
mis ojos estaban cerrados
y en esa no tan abrupta oscuridad,
tuve una visión:
tres llamas verdes, muy claras, muy nítidas,
no despedían calor,
pero recuerdo que trajeron paz a mi alma
por esos breves momentos…
Aún hasta la fecha las recuerdo bien,
aunque nunca supe si existía algún significado,
de hecho no marcaron ningún parte aguas en mi vida,
esa época siguió siendo crispante y dolorosa.
Abro los ojos y como si no se abriera…
Sólo recuerdos,
sólo soledad,
sólo oscuridad…
Recuerdos en la oscuridad...
