Mi vida me gustó lo que escribí en tu metro y pues quice pegarlo aquí... Te amo...
Amor de verdad doy gracias a Dios por unir nuestros senderos, por permitir que en esta maraña de conexiones, en este mundo de gente que va y viene, tu y yo nos hallamos encontrado, el nos pone en este camino, el ha permitido que por distintas situaciones estemos juntos y entre nosotros halla nacido el amor.
Un amor que ha traído a mi vida muchas cosas positivas, muchos momentos hermosos, mucha intensidad de vida.
Gracias Dios por la bendición de conocerte, de amarte y de sentir tu amor. y también gracias por los momentos difíciles, en los que ha parecido terminar todo y que sin embargo han sido superados por este gran amor que existe entre nosotros.
Este amor no es una casualidad, no es un amor de cuento de hadas en el que la pareja se conoce y vive feliz por siempre, no es así, tú y yo lo sabemos. Este amor es un amor de esfuerzo diario de trabajo, de inspiración, de despertar cada mañana y decidir seguir amando. Es un amor de esfuerzos y sacrificios de entrega y de pasión, de ir donando cada uno de nuestros miedos y temores, de nuestras manías y nuestros defectos, de nuestros presentes y pasados al otro, donación, curación, confianza…
A lo largo de estos nueve meses hemos vivido toda clase de situaciones, momentos verdaderamente románticos, interminables pláticas de compenetración espiritual, de historia y vivencias, de pasados y presentes, de confesiones y descripciones. Momentos exquisitos de placer, de pasión y entrega, aterradores instantes de desesperanza, de ira, de incertidumbre. Silencios sepulcrales, cantos maravillosos de comunicación, distancias que duelen, distancias que acercan, cercanías emocionantes, cercanías dolorosas. Esfuerzos mayores y menores. Sacrificios visibles y sacrificios invisibles. Hemos compartido la vida juntos y hasta ahora nada ha podido vencer a este amor, nada ha podido disminuirlo y mucho menos destruirlo.
Es cierto Dios permite muchas cosas, guía y construye nuestros senderos, pero de nosotros depende el caminar, cuando Dios crea al hombre, lo primero que hace es otorgarle la libertad, no crea títeres que se mueven a su antojo, el nos crea con libertad, esa libertad que incluso utilizamos para negarlo. Así en lo nuestro Dios nos ha puesto en el comino, pero nosotros hemos decidido seguirlo, a lo largo de nueve meses, han habido cruceros, invitantes atajos que podrían habernos separado y sin embargo seguimos caminando juntos, tomados de la mano, guiados por el amor que existe en nuestros corazones y cada tormenta superada nos ha hecho mas fuertes mas unidos, mas enamorados.
Hoy cumplimos nueve meses y tenemos la oportunidad de revisar el trayecto, de recordar todo lo que hemos caminado y de tomar la decisión de seguirlos haciendo, de valorar lo que tenemos, de pensar en lo que queremos, de recordar todos los momentos, de darle su verdadera dimensión a los esfuerzos, a la inspiración, a los sacrificios. A aprender de nuestros errores, de nuestras derrotas y saborear nuestras victorias.
Al recuento de estos nueve meses yo me considero un hombre afortunado, dichoso y feliz, con una vida plena, plena de amor, todas mis capacidades las he puesto al servicio del amor, de amor por ti, y muchas de ellas han sido llevadas al límite, a dar lo mejor de mi, a intentar crearen cada dibujo una obra de arte que valla más allá de simples dibujos, que exprese un sentimiento que habita en mi. Mis letras también han buscado perfeccionarse un poco más cada día, buscando las palabras adecuadas que puedan describir este gran amor que siento por ti. Así cada parte de mi vida se ha vuelto intensa, buscando ser mejor, un poco mejor cada día, intentando con cada mensaje de madrugada para despertarte ser diferente, expresar en la mas mínima actitud este amor que siento por ti.
Se que tu también vives el amor intensamente, lo siento, lo percibo, su luz es notoria, se que haces muchos esfuerzos, se que tu inspiración es exigida por el sentimiento que nos une, se que le robas tiempo al tiempo para estar conmigo, se que muchos cerillos han sido apagados antes de encenderse, se que muchos temores han sido vencidos y otros mas están en proceso, se que me amas con todas tus fuerzas, a tu manera, con total entrega.
Y aquí está el verdadero milagro: tú entrega total, mi entrega total… Dos seres entregados el uno al otro, decididos a amar hasta el tope, hasta el final, hasta el límite de las fuerzas, decididos a caminar por el sendero que Dios construyó, juntos, tomados de la mano, mirando al infinito, buscando que este amor perdure por siempre.
Tere Laura gracias por no soltar mi mano, por caminar a mi lado estos nueve intensos meses, por velar por mi, por apoyarme en los tropiezos, por permitirme ayudarte en los momentos difíciles, por dejarme estar ahí, cuando todos parecen dar la espalda.
Nueve meses de vida en el amor...
