Aquella noche...

En tu corazón sabias que no existía futuro

y me prometiste un futuro…

sabias que me enamoraba

y me dejaste enamorarme,

sabias que todo era una farsa

y dejaste que la defendiera…

sabias que sufría

y me dejaste sufrir…

Hace un mes esta escribía:

Tan cerca y tan lejos

El silencio más doloroso de mi vida

Creo que nunca me había sentido tan solo en mi vida

A pesar de que el sol caía a plomo

Mis ser estaba mojado

En mis ojos no paraba de llover.

Tanta desesperación,

Tanta desesperanza

Tanta confusión

Tanta incredulidad

Tanto, tanto dolor

Dolor insoportable

Y por mas que buscaba donde dolía

No podía encontrarlo

Pero dolía y dolía mucho

Nada de lo que hacía me sacaba del trance

Imploraba que mi cuerpo se agotara

Que por fin pudiera dormir

Pero todo era en vano

Ni mis gritos de “piedad Señor”

Ni los gemidos de llanto

Ni las lágrimas a borbotones

Hasta secar mis ojos

Eternos minutos, horas

Hasta que un golpe de inconciencia

Un aberrante deseo de muerte

Me dejó semiinconsciente…

Una conclusión a la que no quiero llegar…

¿Esto puede ser resultado del amor?

Aún recuerdo aquella noche y como, en el nombre de amor y la verdad perdoné el terrible y doloroso instante… Y a pesar de todo aquí estoy dándote mi amistad…

¿Y aún me cuestionas?


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