Paisajes

El silencio poco a poco se va apoderando de mi espacio, una sensación fría avanza en la estepa de mi alma, la soledad se frota las manos y mira mi corazón con avidez, poco a poco, la realidad va tomando forma, el aturdimiento se aleja…

Mirando sin mirar, respirando por inercia, deambulando, un cansancio me hace anhelar la cama, buscar la inconciencia, aún así la vida exige, hay que seguir, las realidades de existir no cesan, las soleadas miradas de los que me rodean no tienen la culpa de la lluvia en mi interior, la vida sigue, la experiencia me dice que no hay pausa en el continuo ir y venir…

Voces cercanas, con cariño, con amor, vierten palabras de ánimo y de alivio, pero los oídos ensordecen y la realidad aplasta, porque al terminar el día la cama espera vacía y fría, el silencio es profundo, la piel duele de ausencia, los labios se sienten marchitar, el corazón se contrae y duele, los ojos no leen…

En este caminar por la vida, tratando de vivir al máximo, realmente todo es intenso y hoy toca soledad, es transitar por un pantano sombrío y solitario, que en su naturaleza no permite ver mas allá, solo queda continuar el paso, soportar las sensaciones hasta que la geografía se transforme poco a poco.

Por momentos me alimento de recuerdos, mi mente crea fantasías evadiendo la realidad, pero la única realidad es que este paisaje apenas inicia...


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