Desde tiempos inmemoriales
la noche por su oscuridad
ha sido símbolo
de lo oculto y lo negativo,
ha sido refugio para los amantes
y la pasión,
pero también
existe la noche mágica,
donde al abrigo
de la tranquilidad y el silencio,
dos almas pueden
establecer un vínculo,
una comunicación intensa y profunda…
Yo he vivido
una noche mágica,
donde todos mis temores
se desvanecieron,
donde la libertad floreció,
libertad de pensara,
libertad de sentir,
libertad de soñar,
libertad de decir…
Noche mágica
de intercambio de idea,
de sentimientos y emociones,
de recuerdos y de pasiones,
noche de encrucijadas
y de apertura total,
noche de fusiones,
de intima unión,
de profunda comunión…
Una noche mágica
donde percibes a un alma gemela,
más pura, más bella,
más llena de vida,
pero tan parecida,
tan cercana al camino
que has querido llevar
o por el sendero
que la vida te ha conducido…
Noche mágica,
mágico momento,
mágico instante
donde el límite
del amor y la amistad no existe,
donde el placer espiritual
agita tu corazón,
donde el tiempo
parece no transcurrir
y la distancia no existir…
¡Ah! bella noche
aun cierro los ojos y te miro,
y mi alma se calma,
mis temores y preocupaciones
se alejan…
Bella noche
en la que por breves instantes
la carga del corazón se volvió liviana…
Gracias al bello ser,
que me dejo vivir su magia,
en un mágico reencuentro,
en el marco de una especial,
tierna, apasionante y bella
noche mágica…